lunes, 23 de enero de 2012

Trabajando en Suecia: la máquina de cafés

Culturalmente los suecos y los españoles se parecen más bien poco, y en un entorno laboral menos aún: los silencios, el feedback… todo cambia. Sin embargo, hay un momento que a un español le será muy familiar, una máquina que los suecos manejan con una soltura y una frecuencia admirables: la máquina de cafés.

Tanto en España como en Suecia la máquina de cafés se ha convertido en una parte central de la vida empresarial. En España hemos tenido hasta una serie de televisión bastante graciosa sobre el tema, cámera café, donde se veía cómo los trabajadores de una empresa se tiraban el día frente a la máquina de cafés, medio escaqueándose de sus quehaceres diarios, medio desconectando para volver al trabajo a darlo todo. En Suecia la máquina de cafés tiene tanto protagonismo como en España o incluso más, porque no tenemos que olvidar que Suecia es el segundo país que más café consume por habitante con un promedio de cuatro cafés al día. Eso sí, hay algunas pequeñas diferencias con España.

La primera diferencia es de tipo pecuniario y es muy positiva: en Suecia el las máquinas de café son gratuitas. Sí señor, beber café gratis en el trabajo es un derecho adquirido. Nada de dejarse cincuenta céntimos cada vez que vamos a la máquina a recargar las pilas. No concibo una empresa en Suecia donde la máquina de cafés sea de pago, este simple hecho provocaría protestas inmediatas y con todo lo pacíficos y tranquilos que son los suecos no me extraña que terminasen a gritos y a golpes. ¿Tan grave sería? Hagamos unos simples cálculos: un trabajador activo se mete seis cafés en el trabajo cada día, veinte días laborables a la semana. Si un café cuesta 50 céntimos, nos saldría la broma a sesenta euros al mes.

Además los trabajadores tendrían un argumento muy sólido para defender la gratuidad de los cafés: fomentan la creatividad y la buena marcha de la empresa. Sí, de verdad. La máquina de cafés es un punto clave de la empresa donde se intercambia información y se realizan micro-reuniones para tratar los temas más diversos. Aquí no pasa como en España, donde irse a por un café es una técnica común de escaqueo y tiene como principal finalidad escapar del jefe durante cinco minutos; en Suecia se utiliza la frase “tomar café” para discutir de manera informal aspectos más o menos serios del trabajo en un entorno más amistoso de lo habitual.

Beber café en Suecia es casi una necesidad. Si no bebes café, puede que te consideren un bicho raro en el trabajo. Es más, te pueden ver como egoísta y antisocial porque muchas veces cuando un compañero te pregunta si quieres tomar un café no te está preguntando si quieres tomar un café, te está preguntando si tienes unos minutos para discutir algo relacionado con el trabajo, y no te lo dicen directamente porque es tan habitual hacerlo que dan por supuesto que en todo el mundo se utiliza la máquina de cafés como lugar de mini-reuniones. Si no bebes café da igual, levántate, acércate a la máquina de cafés y ponte un chocolate caliente, prepárate un té o coge un vaso de agua. Lo que quieras, pero vete a rondar la máquina: tus compañeros te lo agradecerán.

4 comentarios:

  1. Mi empresa no es Sueca, pero da café gratis a los empleados ;) (Me considero afortunado por ello)

    Curioso artículo, gracias.

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    1. @Jorge - Eso será que poco a poco los españoles nos estamos volviendo un poco suecos empresarialmente hablando (ya iba siendo hora). El primer paso es el café gratis, el siguiente y más difícil será que no sepa a rayos :D

      Aún así creo que el propósito general de ir a por café sigue siendo distinto en ambas culturas: de un "a ver si me escaqueo cinco minutillos" español a un "vamos a recargar las pilas y hablar de algo importante del trabajo" sueco.

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  2. despues de leer esto, ahora si me convencí de vivir en suecia...jeje soy colombiana sinónimo de café...que tal será el sueco? no importa café es café-

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  3. Hola Isabel!

    Sí, para alguien a quien le apasione el café, Suecia es un buen destino. Les encanta! Tienen multitud de variedades, incluso en las casas es muy habitual que tengan una máquina artesanal para moler granos de café heredada de sus abuelos o bisabuelos. Eso sí, el café de máquina en las empresas es más bien malo. Pero en las tiendas hay una variedad impresionante, y café de Colombia por supuesto que tienen :)

    Muchas gracias por tu comentario!

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